Escribiéndome... para romper violines

10.1.10

Huellas

Cientos de lunas, puedo leer en mis ojos, que han pasado y recuerdan huellas.
Intactas en cada rincón.
Permanecen como manchas de humedad… y no tan crueles como el tiempo mismo.
Nos alejemos o nos acerquemos al punto de partida. Mientras tanto, nuestro corazón toca un Blues…
Huellas necesarias, como la guerra desmesurada contra el inmortal miedo a fracasar, el temor de vivir, de ser uno más, y hasta a veces, de no ser ni siquiera eso.
El dolor inevitable, el sufrimiento optativo… Da vueltas por mi mente, formando un sinfín de ecos. Se repiten. Prometen seleccionar las huellas puras, teñir mi materia gris en verde, alejarse de aquello que no logra el mismo efecto y deshacerse para siempre. Se repiten. No es más que eso. Prometen y repiten.
Se incluyeron como tatuajes. Nunca pulimos esos diamantes… Aprendamos a despedirlos. Los palpamos. Se grabaron en nuestras manos.

Nada fue inútil, todo llenó el cofre alguna vez vacío. Lo que no brilla… opaca el fin.





Carol- Bord... ¿VENDEN PASTILLAS PARA NO SOÑAR?

Fantástica Really

Existe la fantasía y la realidad, aunque la existencia de la primera no sea literal.
Muchas veces, se dan la mano (teniendo en cuenta que el mundo que nos tocó no sabe distinguir siquiera el bien del mal aunque juzgue mal o bien... Porque preferimos hablar de ellos, sin admitir que esa dualidad vive en nosotros).
En fín, acortando un poco este minuto de profundísima reflexión, el punto es que la fantasía que vos tenés sobre mí, siempre choca con la realidad que yo tengo de vos, y mi fantasía ya no tiene ni bolo secundario. Ni quiere. Parte de la vida es tener por supuesto que ni por todas las vidas de fantasías que yo tenga, vos sos eso que no fue idealizado, ¿y qué? A mi madre gracias.
Y a vos.


Vida

No somos más que la misión que tenemos
la tuya, cuidar de mí
la mía, decirte que me alcanza

Me basta con ver cómo tus labios
se posan de un extremo al otro.
Me muero por hacer de mis líneas
un mar de dulzura para tu alma.

No somos más que lo que el cuerpo nos deja ser,
podríamos y nos da miedo.
Ya no te siento lejos.
Ya no te veo con los ojos abiertos.

Sé de lo que tu voz me oculta,
sé de lo que tus huellas lastiman.

Puedo ser el pan que calme tu hambre,
o quien refuerce las cadenas que no se ven
Puedo ser la calidez que aplaque tu vendaval
o sólo puedo extender mis brazos por vos,
toda una vida.



Carol- Bord
, un dulce de leche

Bienvenida de Web

Alguna vez alguien dijo que
"Nada es, todo fluye".
Es decir, existen dos probabilidades ante mis aspiraciones con mis escritos.
La primera, definitivamente no nací para esto, aunque el agua en su curso pretenda enseñarme a no morir en el intento.
La segunda, parada en la orilla me aburro.
Esto que escribo, no es más que parte de mí. Espero seguir nadando, y que fluya...

Carol- Bord