Según la RAE, la felicidad es el "Estado del ánimo que se complace en la posesión de un bien"
Coincidimos que la felicidad se entiende como el estado del ánimo en donde se disfruta de lo que se desea; es satisfacción, dicha, contento.
Algunos la conciben como algo supremo, como algo absoluto e inalcanzable a lo que se aspira, pero que partiendo de que sea inalcanzable, va a ser al pedo todo esfuerzo que se haga por conseguirla. Otros, la conciben como un ente abstracto mutable; es decir, soy feliz ahora que estoy escribiendo estas pavadas.
Hay una sobrevaluación de la felicidad, que al creer que cuando se alcanza será invariable y suprema, dejando de lado que es posible estar feliz de la vida escuchando un buen disco, y a los cinco minutos maldecir a todo el planeta porque la lluvia me arruinó el pelo. Hay personas, que increíblemente parecen no tener oscuridades, ni ser sombríos. Pareciera ser que jamás dijeron malas palabras, que nunca probaron drogas, que ni piensan en masturbarse. Son puros. Pareciera que la felicidad los alcanzó con una ronda inmortal de Canabbis, como en el caso de Claudio María Dominguez.
Todo el tiempo, tratamos de hacer cosas para ser felices. Mientras tanto, en esa búsqueda que no permite GPS, nos vamos contentando con pequeñeces en el camino, como es debido.
Como aún Susanita no conformó su nido, se contenta con saber tejer escarpines; Como un catalogado “loco” aún no es considerado apto para la sociedad, se contenta como niño con caramelos de todo lo que termina en PAM; Como un prestigioso diplomático, aún no encontró oportunidad para revolear su título al demonio e irse de viaje Hippie, se contenta por el momento, trabajando duro y comiendo chipá cuando nadie lo ve; Como Barreda, había quedado sin familia a la cual desearle “felicidades” en las fiestas, y sin recordatorios de lo que era la libertad, se contentó con ser odontólogo, homicida y también abogado. Como yo, no tengo quien me pague para redactar una columna, me contento con escribir sobre la felicidad.
En una exhaustiva encuesta a cientos de personas, concluimos en que hay tantas concepciones de felicidad, como seres humanos. Ellos contestaron. Aquí algunas de sus respuestas.
¿Qué será la felicidad para un bipolar?:
-“Es el sentimiento vital más hermoso, porque estás arruinado y te querés suicidar.”
¿Qué sería la felicidad para un mitómano?:
-“Es contarle al mundo entero que me siento plena por haber tenido sexo anal con Gandhi después de hacer el 69 con Stephen Hawking, mientras María Magdalena me pedía que me comporte como una dama.”
¿Qué será la felicidad para un paranoico?:
-“¿Qué, me estás cargando? ¿Para qué lo querés saber? ¿Para contarle a la GESTAPO? ”
¿Qué será la felicidad para un depresivo de baja autoestima?:
-“¿Felici qué? Perdón, pero creo que lo que yo piense, no le aporta nada a este mundo hostil…”
¿Qué será la felicidad para un cura, lógicamente sin vida sexual activa, ni licencias morales en su doctrina?
-“¡Que se vengan los chicos de todas partes!”
¿Qué será la felicidad para una madre judía?
-“Que las desgracias no pesen sobre mi familia. Para eso voy a colaborar ahorrando hasta las palabras que use”.
¿Qué será la felicidad para una madre católica?
-“Que, así como el Señor nos envió sus Dinosaurios para comprobar nuestra fé, también nos envíe bendiciones para limpiar los pecados en mi familia por tener un hijo ateo… ¡POR MI CULPA, POR MI CULPA, POR MI GRAN CULPA!”
¿Qué será, entonces, la felicidad para una madre atea?
-“Que mi hijo no repita el año en la escuela, Dios mío, ¡Te lo ruego! ¡Necesito un milagro!”
¿Qué será la felicidad para un nihilista?
-“Me haría muy feliz que el concepto de felicidad se extinguiese junto a la humanidad y su obstinación sobre el sentido carente de la vida”.
¿Qué será la felicidad para un agnóstico?
-“La felicidad sería hermosa, pero también no sería hermosa.”
¿Qué será la felicidad para un escéptico?
-“No creo en la felicidad, hasta que no se apersone a tocar la puerta de mi casa”.
Finalmente, la encuesta concluyó en algunos célebres personajes: Para Maru Botana, era crear una fundación que fomente la difusión de métodos anticonceptivos para ayudar y concientizar a las mujeres. Para Withney Houston (la pregunta había sido formulada antes de su fallecimiento), la felicidad suprema la alcanzaría al dejar la música y dedicarse de lleno a enseñar Feng Shui. Para Rodrigo Barrios, lo único que lo haría feliz sería pasar la tarde del domingo con su hijo en los juegos de Unicenter, preferentemente en los autitos chocadores. Para Alessandra Rampolla y un grupo de jóvenes botineras, al pensar en felicidad, lo único que se les cruzaba era “Organizar un levantamiento revolucionario contra los principios del hedonismo y epicureísmo”; Y para Charlie Sheen, según sus palabras, sería extremadamente feliz estudiando el curso de Operador socioterapeuta para tratamiento n adicciones, y poder ayudar a jóvenes que no saben qué hacer con sus vidas. Carlos Méndez, un riojano que se ofreció como colaborador en la encuesta, afirmó que debido a su efímera vida sexual en juventud, soñaba ser feliz ante sería la posibilidad de organizar una orgía nacional, en donde hombres y mujeres se prestasen como sujetos pasivos, mientras él pusiera su miembro genital en activa acción.
En fin, claramente estamos repletos de connotaciones para lo que felicidad respecta.
Pero la verdadera felicidad, hay quienes dicen, se encuentra siempre en las pequeñas cosas…
Carol-Bord Forget your troubles, come one! get happy =)
No hay comentarios:
Publicar un comentario